Hacía un siglo que no hacía galletas ni nada parecido y ayer me entró un deseo irrefrenable. Sigo con mi misión de acabar con el alforfón y la semolina que me queda por casa.
125g mantequilla, 100g azúcar moreno, 1 huevo, 1 cucharada miel, ralladura de un limón, 50g alforfón, 50g semolina fina, 115g trigo, una pizca sal
Cremar la mantequilla con el azúcar. Añadir el huevo, la miel y la ralladura de limón. Incorporar las harinas y la sal. Hacer bolas del tamaño que se prefiera, ponerlas en una bandeja de horno con papel de hornear y aplastarlas ligeramente. Hornearlas en horno caliente hasta que estén listas.
Mi horno tiene mucha personalidad, yo lo enciendo cuando empiezo a hacer las galletas y las cuezo a fuego medio 10 min por un lado, les doy la vuelta y las dejo 2 min más.
Quedan crujientes por fuera y tiernas por dentro. Saben a miel y limón.